Ha llegado el momento, nos hemos cansado de pelear por nuestro pasado, las carreras que estudiamos, experiencias laborales previas, los intentos fallidos… Ahora vamos a luchar por nuestro futuro: queremos ser programadoras. Vamos a quitarnos de la cabeza falsos mitos y a romper estereotipos. Somos mujeres, somos treintañeras y somos júniors. Tenemos mucho que aprender pero también mucho que enseñar ¿nos acompañas?